La ciencia ha revelado que hacer el amor nos hace más
inteligentes… pero sólo si es con una pareja nueva.
Resulta que una neurotrofina
relacionada al crecimiento de las neuronas se encuentra en mayor proporción en
personas que recientemente se han enamorado. La neurotrofina aumenta también
durante la excitación, y al probar algo nuevo.
Las primeras etapas del amor
nos hacen estar más atentos y alertas a las cosas que suceden a nuestro
alrededor, y es el mejor momento de nuestro cerebro, ya que se estimula el
crecimiento neuronal en el área del hipocampo, la zona del cerebro responsable
de la memoria y el aprendizaje.
Por otra parte, el sexo
provoca un aumento del flujo sanguíneo hacia el cerebro, mejorando los niveles
de oxígeno. Además, durante el orgasmo las neuronas son más activas y necesitan
más oxígeno. En el caso de las mujeres, el aumento de determinadas hormonas
mejora la agudeza mental, la concentración y el tiempo de reacción.
El sexo es divertido,
placentero, nos ayuda a liberar tensiones y es un excelente ejercicio físico
con el que se queman calorías.
Mantener una vida sexual
activa sin que caiga en la monotonía puede parecer complicado, sin embargo,
existen herramientas que facilitan la diversión y aumentan el placer. Los
preámbulos y los juegos eróticos son la clave para no perder el interés.
Comenzad cada día con
un beso. Algo tan sencillo pero que muchas veces olvidamos. Algo que parece tan
tonto, pero que es muy importante, porque también nos expresamos a través del
contacto físico.
Por Redacción Día a Día
No hay comentarios:
Publicar un comentario