· Al hacerlo nuestra cuerpo está más liberado y puede respirar mejor
Dormir es una de las actividades básicas del ser
humano y uno de los mayores placeres para muchos. Según los expertos debemos
dormir diariamente alrededor de 8 horas, sin embargo muy pocos los que cumplen
a esta regla. Si bien unos no llegan a esta cantidad, otros la sobrepasan por
mucho.
Además de que muchas personas se diferencian en la
cantidad de horas que duerme, también hay otros aspectos que varían según los
hábitos de cada persona. Están las personas que necesitan estar tapadas para
poder conciliar el sueño, las que son capaces de dormirse en segundos y sin
importar donde se encuentren, y los que duermen directamente sin ropa alguna.
Este último hábito no es el más común de todos, sin embargo es uno de los más
beneficiosos.
Beneficios de dormir desnudo
Una piel mejor cuidada:
Al dormir con
ropa estamos poniendo una barrera y dificultando que nuestra piel respire. Si
estuviéramos sin ropa, esta podría generar más grasa marrón o parda, que se
activa cuando uno se enfría, y con ella tener una piel más sana y tersa.
Una mejor relación:
Cuando dormimos desnudos en la misma cama que nuestra
pareja, la relación entre ambos mejora. Al estar desnudos sentimos más conexión
con la otra persona y esto hace que la relación sea más fuerte.
Ayuda a la hora de adelgazar:
Si dormimos desnudos no impedimos que el cuerpo
descienda su temperatura de forma natural, lo que provoca que queme grasa por
sí mismo. La cantidad de grasa que quema no es la misma que se consigue con el
ejercicio, sin embargo es una ayuda más.
Minimiza el riesgo de diabetes:
La diabetes está relacionada directamente con los
niveles de azúcar en sangre de cada persona. Al dormir desnudo estos niveles
tienen mejor estabilidad por lo que se reducen las posibilidades de padecer
dicha enfermedad.
Mejora la capacidad reproductiva: Los hombres que
duermen desnudos tienen un mayor nivel de fertilidad. Esto se debe a que si al
estar desnudo el cuerpo no tienen calor excesivo y no se altera la producción
de la testosterona.
Menor estrés:
Al dormir sin ropa nuestro cuerpo genera una hormona
cortisol. Esta hormona reduce el estrés y provoca que sintamos menos hambre al
despertar.
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