La respuesta a esta pregunta
tantas veces formulada es muy simple: sí, las relaciones sexuales son una buena
alternativa para quemar esas calorías de más. Sin embargo, la cosa no es tan
simple como parece. Circulan por ahí muchísimos mitos al respecto, la mayoría
de ellos falsos. Es de cajón que nadie va a sustituir una hora de running
o spinning por otra de sexo. Se quema grasa, pero tampoco tanta.
Perder peso y adelgazar es un objetivo más relacionado con dietas o sesiones de
entrenamiento, éstas son las técnicas más eficientes, pero el sexo puede servir como
ejercicio complementario, siempre que lo hagáis correctamente.
Hay que follar mucho
para quemar grasa.
Lo más importante es escoger
las posturas más adecuadas, pero también afectan otros muchos factores como el
peso de la pareja, la forma física de ambos, la intensidad del orgasmo, la
duración del coito, la utilización de juguetitos extra, etcétera. En términos
generales, los estudios aseguran que puedes llegar a quemar unas 100 kcal por hora,
más las 60 correspondientes al orgasmo. Es decir, en total tus
relaciones sexuales pueden hacer que pierdas entre 150 y 200 kcal.
¿Qué te parece? Pero no te
vengas arriba, recuerda que todo depende de las condiciones que hemos
explicado anteriormente. Eso sí, aunque el gimnasio sea una opción 100% segura,
el sexo es
una buena alternativa cuando no te apetezca calzarte las deportivas y el
chándal. Mucho mejor quitártelos, dónde va a parar.
Las ventajas y posturas recomendadas
Hay posturas más
efectivas que esta.
No podemos llamar a este
ejercicio 'método de adelgazamiento', eso sería pasarse, pero sí que tiene
ciertas ventajas con respecto al resto de deportes. La primera, que puedes practicarlo siempre
que quieras y mientras el cuerpo aguante, es la gimnasia más
casera que existe. ¡Incluso con el pijama puedes hacerlo! Además, debes
practicarlo en pareja, algo que lo hace mucho más divertido. Sin mencionar el gustirrinín con el que
acabas esta sesión de entrenamiento personalizada.
Para que el resultado sea
mucho más eficaz, debes conocer las posturas más recomendadas. El misionero es
moco de pavo si lo que buscas es hacer ejercicio mientras follas. Aunque los
besos, las caricias y los preliminares también cuentan, las posiciones sexuales
más apropiadas son la vaquerita, la mecedora, la posición del tubo, la
bailarina o cualquiera que estimule el punto G de manera directa.
Todas son muy sencillitas y seguro que las habéis practicado más de una vez.
Solo hay que cambiar el chip y poner más empeño durante el sexo, así quemarás
muchas más calorías. ¡Viva la gimnasia entre sábanas!
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