Por la tarde la temperatura de tu cuerpo aumenta a lo largo del día, por lo
tanto optimiza tu fuerza muscular y resistencia para temer un mejor
rendimiento.
pinit Mujer entrenando. Pixabay
Muchos de los gurús del mundo fitness recomiendan
hacer ejercicio a primera hora de la mañana. Supuestamente es justo cuando el sol empieza a salir
cuando estás menos estresada, con menos preocupaciones rondándote en la cabeza.
Además, sostienen que realizar una rutina de ejercicio a primera hora del día
te ayuda a tener más energía y ser más productiva el resto de tu jornada.
Pero si no eres una 'morning person', o sea, una
persona que disfruta de levantarse a las 6 de la mañana – o antes- para ponerse
a hacer una rutina de ejercicio, tenemos buenas noticias: las personas por lo
general tienden a hacer mejor los ejercicios, especialmente si son de alta
intensidad, si los realizan por la tarde.
Según un estudio elaborado por 'The Journal of
Strength and Conditioning Research', una revista médica mensual que publica
investigaciones sobre el acondicionamiento aeróbico, incluida la fortaleza
física, asegura que la fuerza y la flexibilidad son mayores al final de la
tarde y que el esfuerzo percibido -es decir, la intensidad con la que sientes
que tu cuerpo está funcionando- es el más bajo. Los científicos atribuyen estos
efectos a nuestro ritmo circadiano, el reloj de 24 horas del
cuerpo, que hace que la temperatura corporal aumente ligeramente a lo largo del
día y llegue a su punto máximo al final de la tarde.
pinit Mujer entrenando.
Por supuesto, nada de esto significa que estás
condenado a un entrenamiento mediocre si lo haces por la mañana. Realmente lo
que importa que lo hagas de manera consistente, es esta característica la que
puede eliminar la brecha que existe entre el rendimiento de la mañana y la
tarde. Es más esta misma investigación demostró que los atletas que entrenan
por la mañana mejoran su rendimiento y logran llegar a los niveles que
obtendrían si lo hicieran por las tardes.
Otro mito que intenta desmentir este estudio, es que
el ejercicio aeróbico antes de comer sirve para quemar más grasa. La evidencia
científica sostiene que esta práctica, a veces llamada "cardio en ayunas", puede
aumentar la quema de grasa, pero lo hace solo fugazmente. Sin embargo, en el
transcurso de días o semanas no parece ofrecer ninguna ventaja. Por ejemplo,
durante cuatro semanas se le pidió al azar a mujeres jóvenes ayunar o beber un batido de 250 calorías antes de sus
entrenamientos aeróbicos y al resto seguir con su dieta normal -siempre baja en
grasas-, ambos grupos perdieron la misma cantidad de grasa y peso. De manera
similar, el estudio pidió a mujeres con sobrepeso que realizaron entrenamientos
de alta intensidad durante seis semanas primero ayunando y luego sin ayuno, el
resultado del ensayo fue que no había una diferencia notoria en la pérdida de
grasa.
Llegados a este punto, lo que podemos concluir es que
para estar saludable la mejor hora para ejercitarte es siempre que puedas. Si
haces ejercicio a diferentes horas del día, asegúrese de anotar la hora
mientras realiza el seguimiento de su progreso. De esa manera, sabrás cuándo el
reloj de tu cuerpo es más óptimo y te ayuda a cumplir tus metas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario