Más allá del deseo de gustar a los otros está el deseo
de gustar a nuestra pareja. Es una pulsión humana. Pero, ¿qué sucede cuando
esto no lo percibimos en las relaciones sexuales? Y lo que quizá sea peor, ¿qué
pasa cuando no sentimos deseo por la persona que amamos? En ocasiones la
rutina, las prisas, el estrés, el cansancio, el ritmo de vida y la mala
comunicación dejan atrás el deseo sexual. Quieres a tu pareja, estás bien y no
existen problemas de comunicación pero no sabes qué ha pasado con el deseo y
esto nos lleva a hacernos preguntas del tipo: "¿Será que no le quiero lo
suficiente?", "¿me he acomodado a esta relación?", "¿qué
puedo hacer para sentir otra vez la chispa?".
Es cierto que existen muchos factores que influyen en
la libido: desde el estrés hasta la alimentación pasando por los distintos
hábitos en el encuentro sexual, pero lo que también es cierto es que el deseo
es algo que hay que trabajar, no se puede dejar que simplemente surja (como
sucedía al principio). Las parejas que dejan apartadas de su vida las
relaciones sexuales se pierdan algo así como "el pegamento" de la
pareja.
Técnicas para vivir el sexo con pasión
Si la pareja desea reavivar las ganas de disfrutar
juntos, es importante que se hagan las siguientes preguntas, pues las
respuestas quizás estén afectando al deseo sexual.
Pregunta 1: ¿Tienes problemas de comunicación?
El sexo es un modo de comunicarte, ¿expresas lo que
deseas, lo que te gusta y quieres? Un juego estupendo es el llamado “la caja de
los deseos”. Para practicarlo podéis utilizar una cajita cualquiera en la que
cada uno introduzca tres papeles en los que haya anotado cosas que le gustaría
hacer para potenciar vuestra vida sexual. Será útil escribir lo que nos gusta
del otro, lo que te gustaría recuperar del pasado en el presente sexual y algo
que creáis que podéis hacer para reactivar vuestra vida sexual. La idea es cada
semana saquéis un papel de la caja de los deseos para ponerla en práctica
juntos. Os dejamos aquí varias propuestas, pero la clave está en que liberéis
vuestra propia caja de los deseos:
Ideas para la caja de los deseos
Deseo que lleves lencería sexy.
Deseo que digas palabras o frases sugerentes durante
el acto sexual.
Deseo que incluyamos juguetes eróticos.
Deseo que nos demos un baño juntos.
Deseo que veamos películas eróticas juntos.
Deseo que contratemos un masaje en pareja.
Deseo que hagas un baile erótico o un striptease.
Deseo probar una postura nueva.
Pregunta 2: ¿Os apetece tener sexo a horas diferentes?
¿Tenéis el mismo reloj biológico a la hora de tener
sexo? Hay una creencia errónea y es esa de que el sexo es espontáneo,
irreflexivo y tiene que surgir sin más. Pero la realidad es que después de un
tiempo en pareja, hay que buscar en las relaciones un momento de intimidad,
igual que se busca un espacio para el ocio, un día para ver a la familia, un
encuentro con los amigos o una tarde de cine... El sexo no es menos importante
y hay que buscarle un momento.
Una solución puede ser que pactéis tener un tiempo
para la intimidad, para estar juntos, solos, para acariciaros, miraros a los
ojos, poner música, daros un masaje mutuo, besaros y dejaros llevar.
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Pregunta 3: ¿Estáis cansados de hacer siempre lo
mismo?
La rutina nos acecha y es una saboteadora del deseo.
Hace que esperemos las mismas cosas y no nos apetezca tanto vivir algo tan
predecible. Pero, para todo hay una solución y en el caso del sexo la clave es
innovar. Os propongo el juego de las fantasías sexuales. Quizá creáis que lo
conocéis todo de vuestra pareja pero lo cierto es que no existe vida suficiente
para conocer del todo al otro. ¿Os habéis contado alguna vez vuestras
fantasías? Podéis escribirlas en un papel y dárselas a vuestra pareja o incluso
enviar un mensaje o un WhatsApp con ellas para que pueda estimular su mente,
para que se excite al imaginarlo y para que podáis darle un poco de picardía a
la relación.
Es cierto que las fantasías son eso, solo fantasías y
que en ocasiones no nos gustaría que se cumplieran porque no son tan
fantásticas como en nuestra imaginación. Pero siempre se pueden hacer
variaciones que puedan impulsar y dar un giro a vuestra vida sensual y sexual
en pareja.
Silvia Sanz es psicóloga y
sexóloga de Psytel.
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