lunes, 30 de noviembre de 2020

Son tiempos tristes: las discotecas están cerradas, ya no nos besamos

El universo de la seducción está en peligro con la pandemia, escribe para ‘Ideas’ el filósofo francés Gilles Lipovetsky. Pero prevalecerá: nos gusta demasiado

El actor Burt Lancaster besa a Rhonda Fleming en 'Duelo de titanes'.Mondadori/Getty Images / Mondadori via Getty Images
Tiempos muy tristes: los bares y las discotecas están cerrados, ya no nos entretenemos en los restaurantes, los paseos son limitados, los aeropuertos y los hoteles están vacíos, ya no nos besamos, las compras escasean, el turismo internacional y la industria del espectáculo están en estado de coma, el gel hidroalcohólico sustituye a los cosméticos. La crisis de la covid-19, además de provocar miedo y reducir la libertad de movimientos, erosiona brutalmente el encanto de la vida.
Vivimos en un momento en que el universo de la seducción en sus diferentes facetas (realzar el valor y la belleza, divertirse, reunirse con los demás, descubrir el mundo) está en peligro, si no ha sido ya abolido, debido a las operaciones de protección individual (mascarilla), al hecho de estar encerrados en casa, al aumento de la desconfianza y el miedo a los demás. De repente, el cosmos de la seducción ha cedido el paso al estado de emergencia sanitaria con toque de queda, a una sociedad de control, detección, desconfianza y confinamiento. “Permanezcan en casa”, respeten las medidas de prevención y las reglas de distanciamiento; una lógica de anti seducción rige nuestra vida.
Esta crisis de seducción es tanto más llamativa cuanto que se desarrolla en el seno de sociedades que, por primera vez, son efectivamente sociedades de seducción, sociedades donde la regla del “gustar y emocionar” está generalizada, reestructurando radicalmente la economía y la política, la educación y las “costumbres”. Se mire donde se mire, desde los productos comerciales hasta las relaciones sociales digitales, y desde los medios de comunicación hasta el diseño comercial, pasando por la educación, la comunicación política, los museos y la remodelación de las ciudades, nuestra época está marcada por la inflación, la difusión, la mercantilización de las actividades de seducción. Agradar a los consumidores (oferta comercial tentadora del capitalismo seductor), agradar a los ciudadanos (marketing político del Estado espectáculo, demagogia populista), agradar a los niños (educación psicológica y permisiva), agradar a los demás y a uno mismo (sitios de citas en Internet), markeyinen las redes sociales, prácticas cosméticas, moda y sensualidad: esta es la era de la obligación de gustar, que se ha vuelto omnipresente y hegemónica, expansiva y destradicionalizada

En materia de seducción casi nada está prohibido, se permiten todas las libertades: nos encontramos en una sociedad de seducción conectada, individualizada, liberada de los límites del espacio-tiempo, así como de los controles colectivos y las formas ritualizadas. Al mismo tiempo, a la imaginación milenaria de la “seducción peligrosa” sigue una cultura marcada por la incitación permanente a llamar la atención a cualquier edad, la proliferación infinita de ofertas para embellecerse, la difusión generalizada de productos y tratamientos cosméticos, la exaltación del glamour y la sensualidad, el auge de la cirugía estética.
Además, con la modernidad democrática e individualista, la atracción amorosa (amarse, gustarse mutuamente) se impone como el único principio legítimo de las uniones matrimoniales. A la lógica milenaria de las uniones matrimoniales (matrimonios arreglados por familias) que amordazó el poder de los encantos individuales, le ha sustituido el reconocimiento social del matrimonio basado en preferencias personales y “atracciones pasionales”. Hasta entonces, la seducción estaba bajo el control colectivo y familiar; ahora se puede practicar “a pleno rendimiento”, sin que ningún cuerpo externo a los individuos tenga derecho a bloquear el camino a la fuerza de las inclinaciones personales. La seducción es ahora el eje de la formación de uniones legítimas. A los milenios de seducción refrenada les sigue el tiempo de la seducción soberana.

Ningún ámbito materializa la soberanía de la seducción con tanta fuerza como la economía consumista. En todas partes, las lógicas de estimulación de deseos y las lógicas emocionales son las que organizan el universo tecno comercial: en la producción, la distribución, la comunicación, todo se hace para atraer a los consumidores, cortejarlos, entretenerlos, hacer que la gente sueñe, tentar sus afectos. En la época de la hipermodernidad comercial, don juan ha sido vencido, superado, eliminado, se presenta como un seductor artesanal y provinciano frente al poder, la creatividad, el apetito insaciable del marketing. El capitalismo de consumo no es más que un capitalismo de seducción.
Por eso vivimos tan mal la pandemia del coronavirus, que se desarrolla ostensiblemente con una oposición frontal a la lógica liberal-hedonista de la seducción hipermoderna. Interrupción del ocio, negación de la diversión y la fiesta, disminución de las interacciones sociales, cese de los viajes y los placeres poli sensoriales del presente; el hecho es innegable. ¿Pero por cuánto tiempo? Es un gran error creer que la sociedad de seducción está en vías de desaparición, de lo fuertes que son las aspiraciones “ligeras” del estilo de vida consumista, arraigadas en el estado social democrático y la antropología individualista, constantemente revitalizadas por innovaciones sistemáticas en el universo económico. De hecho, están destinadas a todo menos a desa­parecer, independientemente de los himnos entonados en honor a los valores ecológicos y sin importar la ansiedad que genera la covid-19. En China ya se observa el repunte del consumo de los hogares y especialmente de las marcas de lujo.

“De aquí a la eternidad”. Burt Lancaster y Deborah Kerr
La crisis del coronavirus acelerará la transición al teletrabajo, la educación digital, la tele compra e incluso la telemedicina. A lo mejor, esperemos, lleva a corregir la dinámica de la globalización ultra liberal, de modo que los Estados puedan recuperar la soberanía económica, al menos en el ámbito clave de la salud. Pero no acabará con el poder de la seducción, con las ansias de goces estéticos y eróticos, narcisistas y consumistas. Por supuesto, la probable persistencia del cosmos de la seducción no está exenta de graves problemas: degradación de la ecoesfera, descarríos de la educación permisiva, desconfianza hacia la política, populismo, inseguridad, debilitamiento e infelicidad de las existencias individuales. Estos nuevos “malestares en la civilización” son muy reales. Sin embargo, no deben llevar a demonizar el mundo de la seducción, sino a hacer que pierda su hegemonía y su irresponsable hipertrofia consumista. Hace falta promover un ecocrecimiento atractivo; una movilidad eléctrica que no anule el encanto estético del automóvil, una arquitectura neutra en carbono, un diseño sostenible, pero rico en formas hermosas. También un modelo de educación abierta que promueva la reflexión personal, que diversifique y enriquezca los gustos culturales, pero valore el esfuerzo y el trabajo. Tenemos que reinventar la cultura de la seducción haciéndola compatible con el respeto por el medio ambiente, el cultivo de la mente, las exigencias de la razón.
Gilles Lipovetsky
Este es un texto escrito para ‘Ideas’ por el filósofo y sociólogo Gilles Lipovetsky (París, 1944), al hilo del lanzamiento de su último libro, ‘Gustar y emocionar. Ensayo sobre la sociedad de seducción’, de la editorial Anagrama.
https://elpais.com/ideas/2020-11-28/son-tiempos-tristes-las-discotecas-estan-cerradas-ya-no-nos-besamos.html

domingo, 29 de noviembre de 2020

Sexo tántrico, ligues lentos: 2020 fue el año en el que nos replanteamos cómo flirteamos y cómo hacemos el amor

El encierro, la cuarentena y la incertidumbre de estos tiempos han dejado un auge en los talleres online de sexo, tanto en pareja como en solitario, y en las aplicaciones que buscan establecer relaciones más duraderas y profundas más allá de los encuentros fortuitos de Tinder

Los talleres de sexo tántrico y nuevas técnicas de placer (tanto en pareja como en solitario), así como nuevas aplicaciones para ligar de forma más exclusiva y lenta han tenido un auge en 2020, el año que pasamos confinados.Montaje: Pepa Ortiz / Foto: Getty Images
En una reunión por Skype, una decena de mujeres espera experimentar el máximo placer posible. Algunas, con cierta timidez, explican que nunca se han atrevido a probar el “masaje yoni”, una experiencia tántrica centrada en el orgasmo sexual femenino; otras aseguran que son fieles seguidoras de esta técnica, pero que por pura curiosidad decidieron unirse. Después de unos minutos de charla, se inicia la práctica. Keyla Rodrigues, coach sexual y guía del taller, las invita a relajarse, a meditar y a conectarse con Shakti, diosa hinduista relacionada con la belleza, la sexualidad y el amor. Les pide explorar su cuerpo y su vulva, sin vergüenza. El objetivo de esta sesión online es librarse de los prejuicios, conocerse y alcanzar una sexualidad plena, ya sea acompañado o en soledad.
2020 ha supuesto una revolución en todos los sentidos. El encierro, la cuarentena, o la incertidumbre de estos tiempos han hecho que nos planteemos cómo llevábamos nuestra sexualidad, cómo la podríamos mejorar, y cómo nos gustaría vincularnos afectivamente con los demás. Lo decía la catedrática franco-israelí Eva Illouz en una entrevista para EL PAÍS: “El confinamiento ha revelado una línea divisoria: la que separa a las personas que viven solas de las que tienen a alguien importante con quien interactuar. Esta experiencia de aislamiento hará que aumente el número de personas que quieran establecer vínculos de calidad. La pareja adquirirá un nuevo significado: el de ser un refugio contra la angustia, una fuente estable de sexualidad y un remedio para un mundo que, de repente, puede volverse inmóvil”.
Ante este deseo de mejorar la sexualidad, solo o en pareja, y ante un mundo en donde encontrar respuestas en la red es cada vez más sencillo, los talleres online sobre sexo han aumentado significativamente. Se puede encontrar de todo: sexo tántrico (filosofía oriental milenaria enfocada en la energía sexual del individuo para alcanzar el placer en donde no se distingue entre lo normativamente bello y lo feo); talleres sobre BDMS, (ataduras eróticas, dominación, sadismo y masoquismo); técnicas nuevas de masturbación, sexo oral y anal, y sexo guiado en sesiones personalizadas o grupales. “Las personas buscan un cambio positivo en la manera en la que manejan su sexualidad; hay muchas que ya no quieren sexo por sexo porque eso les deja un vacío, así que buscan una sexualidad más profunda y placentera”, explica Keyla, colaboradora de los talleres online en Los placeres de Lola desde Madrid y fundadora de la plataforma Erotiza tu mente.

El sexo ha cambiado en tiempos del coronavirus: los solteros tienen más cuidado por miedo a contagiarse y las parejas, ahora pasando mucho más tiempo juntas, han buscado nuevos métodos de reavivar la pasión en talleres y cursos 'online'.
“Hay muchas personas reconciliándose con su sexualidad. Desde el inicio de la pandemia muchos se han atrevido a inscribirse en los talleres virtuales, ya que eso te brinda cierta privacidad, puedes apagar la cámara frontal en la sesión”, explica, por su parte, Francesca Gnecchi, periodista argentina especializada en temas de sexualidad y directora de Erotique.pink, una tienda de juguetes sexuales donde se imparten talleres y asesorías sobre sexo desde Buenos Aires. “Se inscribe gente que antes tenía pareja y ahora se quedó soltera, o gente en pareja, pero con ganas de explorar y educarse; gente muy joven y gente mayor.”
Muchos han encontrado en la meditación y en la espiritualidad un alivio contra los altos niveles de estrés que ocasionan estos tiempos; por eso las técnicas tántricas (que buscan hacer del acto sexual una experiencia energética y más cercana a lo espiritual) son muy exitosas en la red, según explica Gnecchi. “El sexo tántrico ayuda a conectarte con tu cuerpo de otra manera, pretende ayudarte a reencontrarte con la energía sexual que todos tenemos; está muy relacionado a unir cuerpo, mente y alma”.
Ana y Pedro (nombres ficticios de dos participantes de estos cursillos que prefieren mantener su anonimato) son fieles practicantes del sexo tántrico. Al inicio de la pandemia decidieron probar con un curso online de sexo guiado y desde entonces no han dejado de inscribirse en talleres parecidos. Argumentan que estas prácticas tántricas no solo salvaron su relación, sino que también les ayudaron a crecer como personas y a aceptar su cuerpo sin juzgarlo. “Ver el sexo como algo mágico te cambia la vida y cambia la manera en la que te relacionas con tu pareja. Antes teníamos vacíos emocionales que no sabíamos cómo llenar, había carencias afectivas. En la pandemia decidimos dedicarnos un tiempo para nosotros. Ahora entendemos y valoramos más nuestra sexualidad, nos respetamos más.”

El reencuentro con la sexualidad y la búsqueda de nuevas relaciones sexoafectivas de calidad no solo se ve reflejado en el incremento de los talleres online, sino también en las aplicaciones de citas, tan utilizadas en estos tiempos de pandemia. Según un estudio de la aplicación Meetic, para el 90% de los solteros encuestados en España es más importante establecer una conexión emocional que una física. Entre otros detalles, el estudio destaca que se han reducido las conversaciones de monosílabos y se incrementaron las charlas serias y profundas. La mayoría busca la alternativa del slow dating (una nueva forma de conocer gente online con el que algunas apps reducen el tiempo de conexión a la aplicación y afinan el algoritmo para hablar con menos gente pero más afín a lo que uno busca), perfecta para aquellos que están hartos de las relaciones vacías y fugaces.
“Por primera vez en la vida muchas personas se dan cuenta de que quieren tener una pareja estable, relaciones de calidad, o una sexualidad sana en soledad. He escuchado a pacientes que jamás hubiera pensado que dirían: ‘ojalá tuviera pareja’, o ‘me gustaría tener una sexualidad más consciente’. Antes muy pocos hablaban de la sexualidad tántrica, les parecía algo muy oscuro y pervertido; o del sexting, que parecía ser solo una práctica para adolescentes o depravados, y que ahora se convierte, para muchos, en la única vía de contacto sexual con otras personas”, según explica Ruth González, sexóloga y terapeuta de pareja. Y remata: “La soledad ha llevado a la gente a hacerse nuevos planteamientos en el sexo y en el amor”. Vivan siempre las nuevas perspectivas y el cambio, sea en la vida o en la piel o en ambas.
Mariana Gálvez
https://elpais.com/icon/bienestar/2020-11-26/sexo-tantrico-ligues-lentos-2020-fue-el-ano-en-el-que-nos-replanteamos-como-ligamos-y-como-hacemos-el-amor.html

viernes, 27 de noviembre de 2020

‘Hold outs’: los edificios que se resisten a cambiar

¿Cabezonería? ¿Idealismo? ¿Avaricia? ¿Convicciones? Son varios los motivos que llevan a los propietarios a negarse a vender. Cuando esto ocurre, los nuevos edificios conviven con las resistentes huellas del pasado y convierten las ciudades en lecciones de historia. A veces, también de ética

Los propietarios de estas dos viviendas en Taiyuan (Shanxi) se resistieron a venderlas por el precio que pagaba la empresa promotora. VCG / Getty Images
Aunque en el mundo actual cueste creer que no todo tenga un precio, hay propietarios que se niegan a vender cuando una empresa constructora intenta demoler su propiedad para construir un edificio mayor –bloque de viviendas u oficinas-. En China, esos reductos de resistencia se conocen como “casas clavo”. En inglés se llaman hold outs y en Nueva York y en Londres hay algunos muy famosos. Los reductos –como se llaman en castellano– siempre encierran una historia de profundas convicciones, obcecada cabezonería, estrategia económica o enorme idealismo. En Manhattan organizan tours para mostrarlos y explicar esas historias.

'Hold out' en el 249 de West End Avenue, en el lado Oeste de Manhattan. Daytoninmanhattan
El 249 de West End Avenue de Manhattan es un caso de idealismo. La familia Cook lo compró de la familia Powell a principios del siglo XX. Ferdinand Huntting Cook era el director del New York College of Dentistry [Escuela de Odontología] y su mujer una licenciada en Columbia que fue nombrada Defensora del Departamento de Parques y Jardines por sus conocimientos de botánica.

Casa clavo resistente en una zona de viviendas de clase media en Nanning, al sur de China. Getty Images
Tenían cinco hijos y en enero de 1913 el señor Cook salió de casa para hacer unas compras y nunca regresó. Tom Miller cuenta en el blog Daytonian in Manhattan que le cayó una rama de un árbol y un mes después murió. Poco después, las casas vecinas se fueron vendiendo. Y la señora Cook organizaba bodas para poder pagar los estudios de sus hijos. Para 1924 los había enviado a todos a la universidad. También había organizado sus bodas en casa. Murió en 1932. Su casa ya era un anacronismo, un reducto entre dos grandes torres de apartamentos. Durante una década, la casa se convirtió en la galería de arte Uptown y llegó a exponer a Mark Rothko. Hoy la casa está dividida en apartamentos. Pero se mantiene firme, resistente, casi como un recuerdo.

Dibujo de Julia Wertz para el libro 'Barrios, bloques y basura' (Errata Naturae) del 'hold out' de la Tercera avenida, entre las calles 21 y 22 de Gramercy en Manhattan.
La historia de la señora Cook todavía se repite por medio mundo. La dibujante Julia Wertz dibujó unos cuantos en su maravilloso libro sobre la Manhattan desconocida Barrios, bloques y basura (Errata Naturae). Entre ellos, la autora conoció este insólito reducto en la Tercera Avenida, entre las calles 21 y 22.
Las casas clavo de China no son un asunto del pasado sino una resistencia muy actual. La mayoría de los propietarios que se resisten a vender lo hacen por cuestiones económicas y algunos han llegado a resistir en sus viviendas en medio de una nueva carretera. Los propietarios de dos casas en Taiyuan (Shanxi) se negaron a vender al precio que lo hicieron sus vecinos para construir una zona de oficinas. Y permanecen en el descampado en un reto digno de un buen thriller.
Lo mismo sucedió con esta casa autoconstruida en Nanning, al sur de China. Corría el año 2015 cuando los dueños se negaron a aceptar la indemnización por demolición que ofrecía la empresa constructora. La vivienda quedó clavada en medio del nuevo barrio residencial. Pero fue por poco tiempo. No hay una ruta de las casas clavo chinas. La mayoría de propietarios no resiste la presión inmobiliaria y terminan por ceder. Y vender. Desaparece así su casa, su inversión y una capa de historia de la ciudad.
Anatxu Zabalbeascoa
https://elpais.com/elpais/2020/11/01/del_tirador_a_la_ciudad/1604252705_196130.html

jueves, 26 de noviembre de 2020

Ver porno en el portátil del trabajo y otros riesgos laborales inesperados de la era de Zoom

Llevas toda la vida aplazando lo inevitable, pero ya no hay excusas: para sobrevivir a la era del teletrabajo hay que abrazar nuevos hábitos de higiene digital

Coneyl Jay / Getty
Poner la lavadora, enviar correos electrónicos, tender la ropa. Reunirte con tu jefe en Zoom, atender al cartero, llamar a unos clientes y recibir a tu pareja. Desnudarla, atender la llamada de unos clientes, almorzar, leer el periódico y mirar la clasificación de LaLiga. Hacer ejercicio. El teletrabajo ha convertido el desplazamiento de la casa a la oficina en un trayecto de apenas unos pasos. A veces, ni eso. Lo personal y lo profesional acaban teniendo límites difusos, pero deberías esforzarte por marcarlos y comportarte en casa como si estuvieras en la oficina. Hay motivos de peso.
Empecemos por los relacionados con la tecnología, por los peligros de entrar en una web que no deberíamos, sufrir el robo de contraseñas, ponerle la alfombra roja a un virus que ataque a la empresa (que está lejos, pero está) o mostrar al mundo nuestro espacio más íntimo. Para Isaac Agudo, experto en ciberseguridad e investigador de NICS Lab de la Universidad de Málaga (UMA), la importancia de la higiene digital es igual, a veces mayor, que la personal. “Hay que trasladar a lo digital acciones básicas como lavarte las manos o ponerte la mascarilla”, resume. Para Agudo, la medida más sencilla sería usar un ordenador para trabajar y otro para los asuntos personales. Sencillo, sí, pero nada fácil: las grandes empresas —y algunas de más discreta envergadura— ofrecen a sus empleados un portátil para sus tareas, pero otras no lo hacen. Por eso hay una serie de pasos que, tomados uno tras otro, ayudan a evitar problemas.

Algunos son de sentido común, como que es mejor no poner tu nombre o una palabra sencilla como clave de la red wifi (mejor una compleja), y que no hay que repetir la misma contraseña para todos los servicios. “Si un ciberdelincuente accede a uno, tendrá la puerta abierta a todos los demás”, apuntaban en 2015 los expertos del Hacker Day. También es recomendable bucear en internet con el navegador en modo incógnito. Tu empresa o tu operadora pueden seguir viendo tus visitas, pero en teoría se borran los datos que se almacenan caché, la memoria intermedia que guarda datos para en el futuro no pedirlos otra vez, como qué cookies aceptas o no.
Sin salir del capítulo del navegador, Agudo apunta que es útil usar uno para el trabajo y otro para todo lo demás: “Los favoritos, las ‘cookies’… todo se separa y es mucho mejor”. Y hay que mantener actualizado tanto este programa como el sistema operativo. La mayoría se actualizan solos (o te avisan de que van a hacerlo), pero conviene revisarlo. No actualizarlo es problemático porque los fallos de los programas informáticos se van rectificando y los errores de seguridad, una vez corregidos, se hacen públicos, se exponen y se cuenta qué hace el parche utilizado para solucionarlo con la idea de evitar futuros problemas.
“Es como una reunión presencial”
La posibilidad de que nos hackeen la webcam es mínima, dice Agudo, principalmente porque es poco rentable y es fácil darse cuenta de que está activada sin nuestro permiso; los iconos que muestran nuestros teléfonos o que se iluminen los leds colocados junto a la lente delatan la intromisión. Para mayor seguridad, hay tapas específicas para estas cámaras y un método que nunca falla: colocarle encima un pósit. La gracia es que este papel se puede quitar cuando la situación te lo exija, y una reunión es una de ellas. “Así es como si participáramos en una presencial”, dice Gema Lobillo, profesora de la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la UMA.

La docente, que en sus clases enseña a hablar en público, subraya que mantener la cámara activa también ayuda a tus compañeros de trabajo, quienes así no dudarán de que estás ahí, escuchando. Esta recomendación la incluye en un decálogo donde también caben la gran importancia de la comunicacion no verbal y la idea de vestirse en casa de la misma manera que lo harías para ir a la oficina. “Aporta seguridad”, subraya Lobillo, que aconseja el uso de perfume, corbata, maquillaje, tacones u otros complementos. Sí, puede ser tentador trabajar en pijama, pero no merece la pena porque genera inseguridad, o que te levantes sin darte cuenta y todo el mundo vea que llevas la chaqueta en calzoncillos...
También hay que cuidar el fondo de la imagen; conviene que sea una pared —nada de ventanas y molestos contraluces— y que nadie pueda pasar por ahí. Organizar la habitación de trabajo para favorecer las video llamadas ayuda también a evitar que nadie, ni compañeros ni jefes, puedan averiguar de ti más de lo que te apetece en función de los libros o las fotos de la estantería. “Prevenir es muy importante”, subraya Lobillo, que también apuesta por el uso de auriculares y micrófonos para eliminar ruidos o cuidar la iluminación.
Ante situaciones embarazosas: naturalidad y diplomacia

Por ahora, enseñar los genitales o la forma en la que besas a tu pareja (o dónde) no es importante en tu trabajo. Pero si ocurre accidentalmente durante una reunión “hay que salir del paso con naturalidad y diplomacia”, insiste la experta en comunicación. En una situación más común, tus hijos pueden entrar a la habitación gritando mientras tú estás de reunión. En ese caso, interrumpes el encuentro virtual para decir que debes solucionar un problema familiar, desconectas la cámara, arreglas la situación en casa y te conectas una vez las solventes.
¿Y si prefiero tener la cámara apagada en todo momento para asegurarme de que no pasará nada embarazoso incluso en las reuniones profesionales? No es recomendable, pero tampoco imposible. “Una empresa te puede obligar a participar en las reuniones y estar activo, eso sí, pero es complicado que pueda obligarte a activar la cámara en todo momento”, dice Francisco José Díaz, profesor de la Facultad de Relaciones Laborales y Recursos Humanos de la Universidad de Granada. “Esa obligación tiene algo de vulneración de la intimidad, porque, al fin y al cabo, estás en tu casa, no en la oficina”, subraya. Y no es lo mismo...
Nacho Sánchez
https://elpais.com/buenavida/bienestar/2020-11-21/ver-porno-en-el-portatil-del-trabajo-y-otros-riesgos-laborales-inesperados-de-la-era-de-zoom.html

miércoles, 25 de noviembre de 2020

De hippies nudistas, hombres con raices de olivo y aceite ecológico muy premiado: así es la historia de Finca La Torre

Nos acercamos hasta Antequera, a conocer la tierra malagueña de olivos de Finca La Torre, uno de los aceites más premiados de los últimos años. Creemos que solo vamos a probar la primera cosecha de su aceite biodinámico, pero encontramos mucho más. La historia de una tierra con hippies alemanes que acabó en manos de un suizo y que contrató a dos enamorados del AOVE que han echado raíces muy adentro. Como los olivos.


Hojiblanca, Arbequina, Cornicabra y Picual: cuatro tipos de aceituna que encontramos en nuestro recorrido por la finca que regenta Víctor Pérez, ingeniero agrónomo, andaluz, y también llamado en algún periódico local "el hombre que susurraba a los olivos". Hoy tocaba campaña de recolección, pero ha llovido y la aceituna no se puede recolectar si está húmeda "porque coge sabor a barro y a tierra", nos cuentan. Así que tenemos el lujo de que este ingeniero agrónomo, que llegó hace 9 años a esta finca nos acompañe por los campos de la oliva que tanto cuida. Viene también Borja Sanz, el director de marketing, que venía de una multinacional y lo dejó todo convirtiéndose en otro converso del aceite de oliva de la mejor calidad.

Víctor lleva camisa de campo y pantalón de trabajo, botas para el barro. Barba y pelo desaliñado. Borja, camisa, polo azul, jersey de cuello caja y pantalón chino con unas nike. Son la cara y la cruz de una misma pasión. Víctor echa raíces en el suelo arcilloso que le da sabor al AOVE, Borja echa ramas hacia arriba y trata de llegar a los rincones del mundo que busquen el mejor aceite. Juntos presentaron en 2016 un plan de negocio al propietario de las tierras para convertirlas en lo que son hoy. Antes, Víctor contactó con Borja para "engancharle": le contó que aquella finca hacía un aceite impresionante, pero que "o se montaba una buena marca o se tendría que ir". Juntos triunfaron en su planteamiento porque el dueño desembolsó un millón de euros para la actualización de la maquinaria y la creación de la marca. Eso sí, el aceite, sin ser reconocido, ya venía con grandes premios bajo el brazo.
Pero la historia de la finca es además muy pintoresca. Pertenecía a un alemán que tenía entre manos un extraño negocio: dejaba a unos compatriotas hippies que trabajaran la tierra y vivieran allí a cambio de enviar 1.000 litros de aceite a u país. El grupo, nudista y de rubias melenas, vivía allí y era observado desde la Torre (que luego daría nombre a la marca) por los vecinos del pueblo, hasta el punto que alguna historia de amor surgió entre pastores y alemanas. Parece que estamos hablando de los años 60 o 70. Pero en realidad hablamos del año 2010. Pocos años después, cuándo Víctor Pérez llegó a la finca contratado por un nuevo propietario suizo (como pago del alemán en un negocio), la comuna seguía allí, trabajaban bajo la supervisión del nuevo gerente y aunque llevaban ropa, se desvestían (aliviados) cuándo el ingeniero salía por la puerta.
De toda esta rocambolesca historia llegamos hasta este aceite, que no solo es ecológico si no que se cultiva con técnicas de la biodinámica: todo lo que se utiliza para el cultivo es de la zona y no se trae nada de fuera. Para luchar contra insectos o abonar, se trabaja con lo que la zona te da. Por ejemplo: el suelo está lleno de maleza, mientras en otros sitios solo se vería la tierra porque con algún producto, químico o biológico, se mataría la mala hierba. Aquí se recoge a mano para que no quite alimento al árbol, pero es más lento. El fertilizante se hace con el estiércol de su propio ganado que se mezcla con lo que sobra del prensado de la aceituna, hueso incluido, y se va repartiendo según necesidades.

De estos aceites, todo está vendido antes de empezar la cosecha. El aceite más perfecto se queda en nuestro país: es el que se hace con la aceituna más verde, que deja menos jugo y que tiene un rendimiento de entre el 8% y el 10%. Una aceituna enjuta que da una aceite de altísima calidad y sin defecto. El resto, también AOVE, pero con un 15% de rendimiento, se manda fuera. De hecho, se sigue enviando a Alemania, como antaño hiciera la comuna hippie.
De nuestro paseo por el campo, traemos una lección tras estrujar distintos tipos de aceitunas con nuestras propias manos: a las verdes, cuesta sacarles zumo, pero es zumo muy verde y denso (si te manchas será difícil de limpiar). Las maduras, se aprietan fácilmente y sale un líquido más blanquecino mezclado con la pulpa. Con dos aceitunas diferentes vemos claramente la diferencia de los aceites que luego compramos en los supermercados.
Volvemos de nuestro paseo campestre y visitamos la almazara hoy parada por la lluvia. Víctor nos cuenta que aquí se trae la oliva según se recoge. Que no se deposita en ningún punto intermedio, para que no coja humedad ni empeore su calidad. Aquí llega la aceituna, se lava y se tritura directamente y entera (hueso y todo), luego se separa para sacar el auténtico zumo de aceituna que tanto nos gusta.
Acudimos a la sala donde se almacena el aceite ya filtrado, y al abrir un grifo para descubrir el oro amarillo, sorpresa, encontramos un líquido que, de tan verde, parece artificial. Se trata de la primera cosecha de un Hojiblanca. La clorofila de la aceituna le da ese color extremo y el tono intenso se irá perdiendo con el tiempo tornando a dorado y amarillo.

Toca catar el aceite, que a eso vinimos. Huele mucho a tomatera, a hierba fresca, a verde. Al servir el jugo verde en el plato, y contra el color blanco del plato, ya se ve un color más familiar, verde más claro. Lo catamos con pan y degustamos un aceite que es fresco, con sabor a tomate, a manzana, con cierto amargor ligero y que deja un ligero picor en el retrogusto. Una maravilla que yo creo que se ha de tomar en las ensaladas, las tostadas, los aderezos de parrilladas de carne. Con un pescado a la sal una verdura a la plancha,o sobre una buena pizza casera.
Eso sí, esta joya se encuentra en tiendas gourmet (El Corte Inglés incluido) y sale a unos 37 € el litro si se compra la botella de 500ml. La mejor opción a mi manera de ver es la lata de dos litros por 47 euros que puede servirte para casi un año si lo usas en tus platos más exquisitos. Hacen una edición limitada,One, en botella de vidrio que permite ver el color verde con el primer día de día de la cosecha y eso sí es un auténtico lujo.

Probamos el aceite en una parrillada de carne junto a Víctor y Borja. La carne gana con ese chorrito de aceite por encima, peor también el pan o el queso que disfrutamos junto a una gran chimenea y una pared cuajada de premios enmarcados. Y nos llevamos nuestro aprendizaje final: la fecha de caducidad de un aceite puede ser mucho más tardía, el aceite virgen extra durará hasta dos años con buenas propiedades, pero la fecha de plenitud de un aceite es durante el primer año de su cosecha. Nos cuenta Borja: "Hay que consumirlo entonces porque nunca sabrá mejor que en ese momento". De ahí que el sector no pudiera creer que esta pequeña empresa sacara sus botellas con el sello de la añada, provocando un pequeño terremoto. "Esto es al contrario que los vinos, cuanto antes tomes el aceite, mejor sabrá y más saludable será. No olvidemos que es el zumo de la aceituna y cómo cualquier zumo, pierde con el tiempo".
De hippies nudistas, hombres con raices de olivo y aceite ecológico muy premiado: así es la historia de Finca La Torre (directoalpaladar.com)
MARIA LLANOS

martes, 24 de noviembre de 2020

Lo que necesita saber antes de recibir un masaje desnudo

Nos encantan los masajes. Son muy relajantes y, si se hacen bien, nos sentimos como una persona diferente una vez que salimos de la sala de masajes. Nuestros músculos se sienten como si fueran nuevos y ese olor dulce dura hasta la próxima ducha. Si fuéramos ricos, probablemente tendríamos masajes todos los días. De hecho, eso es más o menos lo que sucedió en Tailandia. No nos hicimos ricos allí, desafortunadamente, pero los masajes tienen un precio increíblemente bajo. En algunas partes del país, puede recibir un masaje de una hora por unos 5 dólares. A menudo sucedía que cuando teníamos una hora libre antes de la cena o antes de tomar el autobús nocturno, solo teníamos un masaje para pasar el tiempo. En realidad, era más barato que tomarse un par de cervezas.
Pero esta publicación de blog no trata sobre masajes tailandeses, especialmente porque no están desnudos. Como europeos, esto nos sorprendió un poco. Estamos acostumbrados a los masajes desnudos. El traje de cumpleaños es prácticamente el código de vestimenta básico para los masajes en Europa. Aunque la ropa que te hacen usar en Tailandia es definitivamente cómoda, todavía no es la misma.

Dónde recibir un masaje desnudo
Un gran lugar para recibir un masaje relajante es obviamente un salón de masajes. Estos se pueden encontrar en todo el mundo. Cuál será el código de vestimenta depende completamente de un lugar a otro. Algunos pueden pedirle que se mantenga la ropa interior, otros le darán un atuendo especial (como es el caso de Tailandia) y algunos preferirán que esté desnudo. Si desea evitar situaciones incómodas, es mejor preguntar por adelantado.
En Europa, también es muy común recibir masajes en centros de bienestar o spa . Estos tienen un par de ventajas. Debido a que esos centros suelen recibir muchos invitados, también cuentan con varios masajistas, cada uno con sus especialidades. Por lo tanto, la lista de opciones a menudo va mucho más allá del masaje predeterminado de pies, hombros o cuerpo completo.
Una ventaja aún mayor de recibir un masaje en un centro de spa es que la experiencia dura más. En lugar de entrar, recibir un masaje y regresar a casa, puede pasar medio día o un día completo relajándose en la sauna, la piscina o el jacuzzi.
En el spa, el código de vestimenta para el masaje será el mismo que en el resto de instalaciones. Si el spa tiene una política de no desnudez, también se esperará que use un traje de baño durante el masaje. Si se trata de un spa obligatorio para desnudos, también se esperará que esté desnudo durante el masaje.

Consejos para tu primer masaje desnudo
La idea de pasar una hora desnudo en una camilla de masaje puede dar miedo. Incluso para naturistas. Porque seamos realistas, rara vez sucede que un extraño se acerque tanto a ti en un centro turístico naturista. Y mucho menos que froten tu cuerpo con aceite de la cabeza a los pies. Muchos principiantes equilibran la pregunta "¿Pensarán que soy un pervertido si solo camino desnudo?" y “¿Pensarán que soy una mojigata si me gusta ponerme algo?”. La respuesta a ambas preguntas es no". Lo más importante es que te sientas cómodo.
Siempre es una buena idea tener una breve charla con su masajista o cualquier otra persona del personal. Ellos le darán tranquilidad y le dirán todo lo que necesita saber. Especialmente si mencionas que es tu primera vez. Este también es un buen momento para hablar sobre sus preferencias y preocupaciones. Si tiene dolores específicos, es importante que el terapeuta lo sepa. Si le dice estas cosas por adelantado, evitará perturbar su trabajo y su relajación a mitad del masaje.
También es una buena idea tomar una ducha justo antes del masaje. El agua tibia calentará sus músculos y su olor puede ser más agradable para el terapeuta. Tenga en cuenta que esas personas necesitan tocar prácticamente todo su cuerpo y que lo agradecerán si no está pegajoso ni apestoso.
Quizás el más importante de todos, asegúrese de apagar su teléfono. Este es realmente el último lugar donde desea recibir una llamada. Y también es increíblemente molesto para el masajista.

Masajes desnudos y sexo
Así como los swingers a veces se esconden bajo el nombre de “naturismo” o “nudismo”, los burdeles a veces se esconden bajo el nombre de salón de masajes. Este fenómeno no es algo que encontrará en grandes salones o centros de spa, sino en lugares más pequeños. En cualquier caso, es mejor verificar esto si desea evitar una situación (realmente) incómoda.
El hecho de que estés acostado desnudo sobre una mesa puede hacerte sentir un poco incómodo y algunas personas sienten la necesidad de romper el hielo. Podemos decirte esto: los chistes sobre un "final feliz" NO son el camino a seguir. Los terapeutas probablemente no solo han escuchado estos chistes un millón de veces antes, sino que también son despectivos para su trabajo.
Tu luna llena no estará a la vista todo el tiempo de todos modos. En la mayoría de los casos, su terapeuta cubrirá las partes del cuerpo que no están siendo masajeadas en este momento con una sábana. También tenga en cuenta que esas personas están haciendo esto como un trabajo y han visto y tocado muchos cuerpos desnudos antes. Lo han visto todo, así que no hay por qué preocuparse ni avergonzarse.

Una nota especial para los hombres
A muchos hombres les preocupa tener una erección durante el masaje. Similar a la preocupación de conseguir uno en un lugar naturista. La etiqueta en ambas ocasiones es la misma: puede suceder, pero no le dé mucha importancia ni esté demasiado orgulloso de ello. La diferencia es, por supuesto, que a diferencia de un lugar naturista, realmente no tienes muchas opciones para ocultar una erección si llegara a ocurrir.
Los masajistas también lo saben y todos han tenido un cliente con una erección antes. De hecho, también están acostumbrados a trabajar en otras situaciones incómodas. Mucha gente se duerme durante un masaje y comienza a roncar, babear o soltar gases. Recuerda, estas personas son profesionales y puedes contar con ellos para manejar estas situaciones de la manera más profesional.

¿Quién me dará el masaje?
La mayoría de las veces, el terapeuta que realiza el masaje se le asigna según la hora de su cita. Puede ser un hombre o una mujer. Todos tienen sus preferencias, a algunas personas les encanta cuando su terapeuta es del mismo género, otras prefieren que alguien del otro género les dé masajes. Si esto es realmente importante para usted, a menudo puede preguntar específicamente por una mujer o un hombre. Pero, en general, es la mejor idea ir con la persona asignada.
Un masaje tiene que ver con la relajación y es muy importante que te sientas cómodo para disfrutar completamente de la experiencia. Esperamos que los consejos anteriores le ayuden a tranquilizarse. Te dejamos con dos NOTICIAS importantes del masaje desnudo:
1. Los masajistas tocan mucho su cuerpo, pero no sus genitales. Si esto sucediera, probablemente esté sucediendo algo turbio y será mejor que se lo menciones al responsable del centro.
2. Como cliente, se supone que no debe tocar al terapeuta en absoluto.
CRÉDITO DE FOTO: Elina Sazonova y Andrea Piacquadio vía Pexels .
Nick y Lins

lunes, 23 de noviembre de 2020

Ronnie O'Sullivan, el mejor jugador de snooker del mundo, se tira un sonoro pedo en plena partida

El silencio de la sala vacía por las restricciones del Covid-19 le delató

Ronnie O'Sullivan, el mejor jugador de snooker del mundo
El silencio de la sala vacía y sin público por las restricciones del Covid-19 durante el Open de Irlanda del Norte dejó en evidencia a Ronnie O'Sullivan, considerado el mejor jugador de la historia del snooker, quien trató (sin éxito) de acusar a un árbitro preguntando si había sido él.

Sin embargo, la sonrisa pícara de 'The Rocket' (apodado así por la velocidad de su estilo de juego, no tardó en delatarle e incluso los nervios, o el bochorno de la situación, pudieron con su concentración y falló su siguiente golpe. ¡Hasta su rival se rio del asunto sin tapujos!
https://www.marca.com/buzz/2020/11/20/5fb80df122601df94f8b4584.html?cid=MARCATV001&s_kw=titular

domingo, 22 de noviembre de 2020

La policía de Cancún disuelve a tiros una manifestación feminista

Los agentes irrumpen con las armas en la mano y gritos de ”ahora si van a valer madres las pinches mujeres". Dos periodistas son atendidos por heridas de bala

Policías avanzan disparando durante la protesta. (Foto: Elizabeth Ruiz)
Un grupo de unos 50 policías municipales de Cancún disolvieron a tiros este lunes una manifestación feminista frente al Palacio Municipal de la ciudad turística. Los uniformados encapuchados, con chalecos antibalas y armas largas irrumpieron repentinamente disparando a mansalva en la plaza central a pocos metros de los manifestantes. Al menos dos periodistas que cubrían las protestas resultaron con heridas de bala. Roberto Becerril, de La Verdad, recibió un impacto en el hombro y a Cecilia Solís, de Radio Turquesa, una bala le dio en el pie.
En ese momento, unos 2.000 jóvenes protestaban frente al edificio público en respuesta a los tres brutales feminicidios registrados este fin de semana en el Estado de Quintana Roo. El grupo de manifestantes había prendido fuego a las maderas que estaban frente a las puertas de acceso para proteger el edificio. Previamente los jóvenes habían roto algunas ventanas y habían quemado papeles del interior.
Cuando los manifestantes estaban a punto de acceder al edificio aparecieron los policías abriendo fuego a tiro limpio lo que provocó la estampida. Sin embargo, persiguieron y siguieron golpeando a quienes trataban de grabar la brutal agresión. Los agentes hicieron varias detenciones, pegaron e intentaron quitar los teléfonos y las cámaras a los periodistas que cubrían la protesta. Otros dos periodistas más tuvieron que ser atendidos en un hospital debido a los golpes de la policía, relataron a EL PAÍS sus compañeros.
Alex Castro, del diario Novedades, quien cubría la protesta para su periódico, detalló que en la plaza había unos 50 agentes. La mitad de ellos empezó a disparar. “Cuando empezaron los balazos la policía tenía bloqueados los dos principales accesos a la plaza para no dejarnos marchar”, relató una hora después de lo sucedido.
La fotógrafa del periódico Novedades, Paola Chiomante, dijo a EL PAÍS que vio a agentes disparando desde la azotea del Palacio Municipal. Según la fotorreportera, la policía “estaba muy enojada y actuó con una violencia desproporcionada” y recordó como oyó a los agentes gritar “ahora si van a valer madres las pinches mujeres”, en el momento en que los uniformados hicieron aparición en la plaza.

Por su parte, la respuesta oficial solo coincide en una cosa: desmarcarse de lo sucedido. Nadie ha asumido hasta el momento la responsabilidad. El secretario de Seguridad Pública de Quintana Roo, Alberto Capella, ordenó una investigación por lo sucedido. “Lo acontecido en Palacio Municipal de Benito Juárez es en todos sentidos inaceptable. Estoy ordenando una investigación interna y poniendo a disposición de la Fiscalía del Estado toda la información para que haga lo propio", escribió en Twitter.
La ira feminista fue acumulando agravios durante todo el fin de semana cuando fueron asesinadas dos mujeres en menos de 24 horas en Cancún y otra más en José María Morelos, también en el Estado de Quintana Roo. Después de una intensa búsqueda, los cuerpos de las mujeres de Cancún fueron hallados el sábado y el domingo por la noche con signos de tortura. El último, el salvaje asesinato de Bianca Alejandrina, tuvo un macabro final este domingo. La joven, de 20 años, había desaparecido el sábado pero sus restos aparecieron un día después dentro de una bolsa de plástico abandonada en una barriada de Cancún.
La protesta de hoy había sido convocada por la Red Feminista de Quintana Roo y se había vuelto tendencia a escala nacional a través de las etiquetas #JusticiaParaAlexis y #QuintanaRooFeminicida, como protesta contra el fiscal Óscar Montes de Oca, el gobernador Carlos Joaquín González y la alcaldesa “Mara” Lezama, por dedicar los esfuerzos al “cuidado de la imagen” de Cancún y no a la seguridad y protección de las mujeres.

Por su parte la alcaldesa de Cancún, Mara Lezama, del partido oficialista Morena, también se desmarcó de la agresión. “En mi carácter de presidente municipal jamás ordenaré ningún tipo de represión en contra de la ciudadanía. He dado instrucciones precisas para que se realicen las investigaciones correspondientes”, señaló. Otra autoridad más que esquivó su responsabilidad, la Secretaría de Gobernación, exigió vía Twitter a las autoridades municipales y estatales una investigación “hasta sus últimas consecuencias sobre la represión y agresión armada contra una manifestación feminista”, escribió en su red social.
En lo que va del año se han registrado una docena de feminicidios en Quintana Roo, según la agencia EFE que cita fuentes de la Fiscalía. A nivel nacional, México registró el año pasado 34.608 homicidios dolosos y 1.012 feminicidios, los datos más altos desde que se contabilizan los asesinatos de mujeres.
https://elpais.com/mexico/2020-11-10/la-policia-de-cancun-disuelve-a-tiros-una-manifestacion-feminista.html
Jacobo García